Este beneficio se obtiene gracias al hecho de consumir al día cuatro cucharadas de aceite de oliva extra virgen. Por cada 5 % más de calorías de este tipo de aceite se reduce en un 28 % el riesgo de padecer un tumor de mama.
Según un ensayo clínico coordinado por la Universidad de Navarra (España) dentro del estudio multicéntrico Prevención con Dieta Mediterránea y el Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición, el ingerir una dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva extra virgen puede reducir en dos tercios el riesgo de desarrollar cáncer de mama.
Los científicos encargados del estudio afirmaron durante casi cinco años siguieron de cerca a 4 mil 282 mujeres españolas que, aleatoriamente, llevaron a cabo tres tipos de dieta: mediterránea rica en aceite de oliva extra virgen, mediterránea complementada con frutos secos y una recomendación de dieta baja en grasas para el grupo de control.
Los resultados indicaron la tasa de cáncer en el grupo de aceite de oliva fue de 1,1 casos por cada mil participantes, en el grupo de los frutos secos subió hasta el 1,8 y en el de control llegó a 2,9, lo que muestra casi el triple de riesgo absoluto de desarrollar estos tumores. Solo se observaron 35 casos de cáncer de mama al término de la investigación.
Se sabe que a los dos primeros grupos se les dio similares recomendaciones en cuanto al tipo de aceite que se debía consumir y la cantidad. Aunque a las integrantes del primero se les regalaba una botella de aceite extra virgen al mes, por lo que lo usaban para todo. Con esto puede romperse el mito de que este aceite no debe usarse para freír, cuando en realidad es lo mejor para ello.
Prevención en alimentación es salvación
Para el Dr. Julio Dueñas, Director Científico de la Clínica OncoGyn, este estudio envía un mensaje que incentiva a la prevención del cáncer de mama y otros tipos mediante una adecuada y sana alimentación.
“Gran parte de los factores de riesgo de contraer cáncer dependen de la conducta personal y el estilo de vida, especialmente en lo que respecta a hábitos como el tabaquismo y la dieta. La falta de vitaminas puede provocar cáncer, por eso conviene tomar grandes cantidades de vegetales, que tiene gran cantidad de vitaminas. Ingerir vitamina C constituye un medio eficaz para proteger al organismo contra el cáncer, ya que actúa como agente de limpieza y antioxidante”, explica el galeno.
Finalmente, el especialista de ProCrear, recomienda cambiar o mejorar los hábitos alimenticios para reducir el riesgo de cáncer de mama u otros, mediante la ingesta de una dieta rica en verduras, beber alcohol moderadamente, no fumar y acudir a realizarse chequeos integrales que pueda detectar cualquier anormalidad en la salud femenina y tratarla a tiempo para asegurar su curación.
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